DISTRACCIÓN MASIVA
ABORTO YA YA YA!
Entiéndase bien: la decisión de un aborto no es un acto libre sino un hecho dramático.
Hace una semanas, mientras a las dos retrasadas mentales se les negaba un derecho legal y cientos de mujeres ingerían o se introducían por vía vaginal un medicamento de prescripción traumatológica --de aplicación predominante en hombres-- comercializado bajo el nombre de Oxaprost (y cuyo principal componente es el misoprostol) o yuyos, o se realizaban raspajes en espacios no esterilizados, y otras --las menos-- concurrían a consultorios con dicroicas y láminas de Monet a que les aspiren la cavidad uterina por cifras no menores a los mil quinientos pesos, yo caminaba por la calle.
En la esquina de Corrientes y Medrano, un grupo de chicas adolescentes comandadas por un señor de camisa leñadora repartía panfletos anti abortistas con leyendas en las que aparecía recalcada la palabra "vida" y levantaba pancartas con fotocopias color de imágenes de fetos en avanzado estado de gestación. Rechacé los papeles mientras pensaba: qué confusión. Desde ya, nadie en sus cabales querría matar a un feto viable (es decir, de más de 24 semanas de gestación y con los pulmones desarrollados al punto de poder funcionar en aire). Discutir la cuestión del aborto desde ese lugar es tramposo. Pero también lo es hacerlo pasando por alto todas las capas de implicancia que tiene esa experiencia.
Todos vivimos de cerca alguna vez un caso de aborto y tuvimos que enfrentarnos cara a cara con nuestros propios prejuicios y principios, y la mayoría de las veces encontramos razones para matizarlos. Frente a la cuestión del aborto parecen haber sólo dos opciones: estar a favor o estar en contra. Pero por supuesto la cosa es mucho más compleja y la toma de posición extrema degrada las posibilidades de reflexión. El problema es que, en el marco de un mainstream tan poco favorable a pensar y debatir (recordemos el escandalete de cuarta que generaron el año pasado las inciativas por la educación sexual en los colegios) decir que la práctica abortiva supone muerte o que nadie que se someta a un aborto está eligiendo libremente sobre su propio cuerpo, y decirlo, claro, desde una postura pro legalización, es un poco complicado --pero no hay que dejar de hacerlo, yo creo.
El año pasado Laura Klein publicó el libro Fornicar y matar (Planeta) que leí para escribir una reseña. Ese libro --inteligente, valiente-- me ayudó a ordenar algunas ideas que tenía sobre el tema y me instruyó mucho sobre la historia del aborto en la Iglesia, el código penal y en las luchas por el control de la reproducción en general. Pero también me ayudaron a pensar el problema mis propias experiencias. (Y aquí un paréntesis: aunque comprendo el poder persuasivo de ciertos nombres confesando el delito, no estoy en todo de acuerdo con la campaña "Yo aborté": la potestad sobre el propio cuerpo debería contemplar también la opción no culposa de conservar el episodio en el ámbito íntimo.)
En un acalorado debate televisivo, relata Klein en su libro, un panel de especialistas discutía los fundamentos de sus posturas. De costado, con intencional poca iluminación y las caras blureadas, una serie de mujeres aguardaba su momento para hablar. Lo que se esperaba de ellas era que dieran testimonio de sus abortos, pero no que opinaran. Como están dadas las cosas, ellas, las mujeres que abortaron, no son expertas. Sin embargo, esas mujeres deberían ser las más autorizadas para abrir ese abanico de cuestiones que se despliega en relación al aborto: la culpa, el dolor, la responsabilidad, las condiciones de posibilidad de cada mujer, la vida, el sexo, la muerte.
La práctica, señoras y señores, ya se lleva a cabo --como de carnicería en algunos casos, maquillada en otros, siempre sórdida e ilegalmente--. Y la ley, de la Biblia en adelante, no debería existir por un contenido ajeno al de la cristalización de las costumbres. El matrimonio civil --esto es, secular-- se legalizó en la Argentina en 1888. El divorcio llegó en 1987. La lógica más elemental --y no me refiero a la numérica-- indica que es el turno de la legalización del aborto. Esperemos que no pasen 80 años --y millones de muertes-- más.
ABORTO YA!
State of nature as a war of all against all
Qué puedo decir. Ayer mismo estuve aquí. Más allá, un chico en camisa descifra con fruición los ensayos de ballet sobre pasto mojado
de un libro cualquiera. Lee, fuma y no levanta la vista sino hasta cuando me voy. Vengo de hablar con una mujer hermosa vestida exactamente igual que yo. Quise hacerle saber lo que sentía y espero que le hayan transmitido el mensaje. Ella me dijo: "Ya te calé" y quisera saber en qué parte de mí habrá hincado sus --grandes, blancos-- dientes.
Hoy empiezo el ayuno. Podría convertir este momento en una fiesta, pero elijo ascetismo y silencio. Sí, El Gran Miedo era esto, creí que lo había olvidado. De la mesa de al lado llegan palabras como "grupo de choque" o "guerrilla". Tal vez debería ceder en el aislamiento, al fin y al cabo qué necesita el zoon politikon sino una red entre nos.
Camino hacia la boca del subte/del lobo. Adentro, la tecnología digital de un celular canta la intro de "Chica" de Beck y un chico de barba roja y remera que dice Skandinav se me pone tan cerca que puedo sentir más que su aura. Y aunque la letra de esa canción sea simple y alegre...
Me pregunto por el origen de este afán documentalista: hoy me toca la dosis de
tinta lacaniana. No voy a contar que las nenas de
Negra me perturban cada vez más, pero puedo hablar, en cambio, de mi buena acción del día: haber entrado, despechugada, a una librería de viejo preguntando por un libro raro indiscutiblemente bueno --el librero también va a tener algo que contar.
Un negro más oscuro que mis pensamientos avanza golpeando contra el pecho la medalla del continente que milagrosamente lo trajo al mundo. En la puerta de la escuela las madres increpan a sus hijos sobrealimentados: quieren saber qué comieron y cuánto --una manera de penetrar en sus cuerpos. Todo este perceptrón se aloja en el área de Wernike y en la de Broca, pero en mi cabeza ruge grabado el listado de las estaciones. Puedo recitar todo el mapa subterráneo esta tarde. Afuera hay sol. Quisiera verlo.
De brevitate vitae
Me paso la mañana leyendo textos perecederos, que cuando lleguen al papel serán subestimados. Implacable, a las 7.40, mi reloj interno anuncia: la paz antihistamínica ha terminado. Todas las noticias hablan de lo mismo sin nombrarlo --las locutoras enroscan interjecciones en la lengua buscando un eufemismo para
aborto.
Me consuelo en la generosidad de poemas viejos y hago todo tipo de aclaraciones para que nadie malentienda. Carezco de certezas sobre las posibes derivaciones de ciertas prácticas recientes. Tejo un texto comprometido con personas indispensables que están lejísimos. En un rato van a decirme cuánto vale mi
full disclosure y no creo poder negociarlo. Más tarde, comeré frutillas silvestres servidas sobre la frazada de la infancia. Supongo que debería estar contenta pero me estoy muriendo de miedo.
Fruta rara*
La cabeza de la chica: una calabaza hueca
oval, piel de ciruela, dientes de piedra.
Desenreda el helecho húmedo de su pelo
y hace una exhibición de un mechón,
deja al aire su belleza de cuero.
Pasión por las partes, tesoro momentáneo:
su nariz está fría como un terrón de pasto,
los ojos en blanco como piletas en invierno.
Un testigo de la muerte
accidental de un gato sin correa
confesó su tranquilidad gradual
frente a cosas como esta:
miles de chicas descabezadas, des-
corazonadas esperando el hacha
el bautismo en la cara de lo que empiezan
a sentir como reverencia.
*[En algún lugar entre Heaney y yo]
Yo tan preocupada por quién soy y desde la vereda de enfrente un hombre grita: "¡Qué hacés, Distracción Masiva!"
Inmediatamente mi cara vira al púrpura.
[Al menos me libré de la maldición de las iniciales dobles --Marilyn Monroe, Brigitte Bardot--; ahora soy DM.]
Adorables malas influencias
La cabellera de B... ya no es lo que era.
Todo empezó cuando entré al baño y en el tacho descubrí unos mechones largos, gruesos y rubios, como los de Rapunzel --un programa a toda luces
aprendido. En este caso, el peluquero fue el hermano, de manera que ambos se encontraban implicados. En los segundos de duda previos al estruendo del reto, B me advirtió: "Yo quería, quería parecer varón".
Ahora, recién bañados y con la ropa limpia, una nueva alteración mancilla el cuadro: la niña ha teñido dos de sus uñas (no consecutivas) con un marcador negro indeleble. No hubo festejos, pero tampoco castigos. Sólo una semisonrisa y la afirmación implícita de que cada cual hace lo que quiere con su cuerpo.
Si soy honesta, aquí no cabe el cría cuervos. Pero: de tal palo, dime con quién andas y todas esas.
En el cielo del Alzheimer
Ella sí flota ahí. Las visitas a la casa de mi abuela, desde donde veo casi la misma gente -extranjera, publicitaria- en el bar que antes era el Café de la Paix, son cada vez más espaciadas. Sería tan fácil leer poesía en sus palabras dislocadas, fuera de tiempo. Pero elijo el camino difícil: no creer en la metáfora y sólo rescatar los fugaces trazos de naturalismo.
Recorro los pasillos mal iluminados de mi infancia y encuentro lo de siempre, las bibliotecas y las fotos: el retrato enorme de Annemarie Heinrich que corona la habitación principal en el que, entre sus hermanas, mi madre sufre -con unos diez años- un ostensible corte varonil, sin la más mínima conciencia de su belleza. Y esa otra en la que hace de novia con el vestido cortísimo y la capucha con borde de piel blanca, tierna osadía.
Entre los libros: los clásicos, los pensadores judíos y las escritoras de clase alta, sí; pero también esos Hemingways que mientras los grandes dormían la siesta me llegaban por ráfagas, los pesados nubarrones de Faulkner, el consuelo de Cortázar, y los que descubrí después: Marcuse, Cooke, Asís. Qué tendrá que ver esa mujer ajada, piel y huesos, ya con todo esto.Hoy, noche de lectura y chocolate.
Las pesadillas se dividen en tres
*pesadillas de responsabilidad [la lista del deber, acumulada, multiplicada, potenciada]
*nostalgia del futuro [escenas percibidas con nostalgia, como de un pasado perdido, pero que en realidad nunca tuvieron lugar, nunca existieron]
*abstracciones [sombras, nubes epilépticas, todo lo negro]
pero anoche, uf, anoche soñé que mi madre leía todo esto y fruncía el ceño.
--no que me importe demasiado a esta altura, claro.
El Zeitgeist se desintegra e insistimos en el error
La extraña lógica de tu frase más torpe
(se quedó, se quedó) se me quedó incrustada en la mente
Decís: rompamos la familia
y empecemos a vivir la vida
Quiero ver a todos mis amigos esta noche
No fue juventud, no fue vida
nacer viejos, tristemente sabios
resignados (bueno, estábamos)
a terminar nuestras vidas
Estoy tan feliz de ser más grande
para poder alejarme de esa época horrible
Esta noche quiero ver a todas mis amigas
Sí, encontraste el amor, pero no estabas
en paz con tu vida
a casa tarde, lleno de odio
despreciando los lazos que unían todo
Estoy tan feliz de crecer
De alejarme de esos años más jóvenes
Estoy enamorada por primera vez
Y no me siento mal
Dejame ver a mis viejos amigos
Dejame que los abrace
Porque los quiero de verdad
¿Te parece loco?
Capitán de los juegos, estructura firme
Me paré en la frontera
Graniza, me llevan a casa
en un auto -¿no tiene frenos? No me importa
Estoy tan contenta de ser más grande
De alejarme de esos años oscuros
Ay, estoy enamorada por primera vez
Y no me siento nada mal
Deséenme suerte, chicas
Chau
Deséenme suerte otra vez
Adiós
Deséenme suerte, amigas
Adiós
Mmm... deséenme suerte, amigas mías
Adiós
Ah...*
*["Break Up the Family" - Morrissey]
kierkegaard en la caja del cereal y por la calle me sonríe un perro
Descalza pero por lo demás completamente vestida avanzo sobre el piso en damero con la caja de copos en una mano. La caja, demasiado entusiasmada para esta hora de la mañana, me incita: ¡arriba! ¡adelante!
"Miedo" debe haber sido la palabra más sonada entre las
chicas esta mañana.
em ad más miehgdo onvlovera namormej. O: miedo a enamorarme/desenamorarme todo el tiempo. "Soy inestable --hasta que dejo de serlo". [
Mi actitud depende de la persona en cuestión (Sei Shônagon)]. "Miedo a que pase y a que no."
Ante la duda, veo signos por todas partes.
Benita, mirando la tapa de una revista, dice mamá, qué linda mujer, se parece a vos --aunque después aplica el mismo adjetivo al frontman de Guasones. Y un perro, podría jurarlo, sonríe cuando paso --o fue ese chico con piercing y collar de perro, da igual.
Todas las ortodoxias están de acuerdo en ver en los discrepantes, desviacionistas o herejes el peligro de los peligros y, la que prefiero,
En el peligro está la salvación. Por mi parte, y aunque escribí la palabra más de una vez en el día, me empeño en cambiarle la letra a las canciones: i´m not
afraid of too many things y everyday is silent and
great.
Voy hacia lo que menos conocí en mi vida: voy hacia mi cuerpo*
Tristram Shandy escribe con la pija.
*[HVT: Htal. Brit., 1984]
Suspicious Minds
Y ahora, ¿qué? Ah, las iluminaciones nocturnas... frases breves, entrecortadas, que van tejiendo su propio tapiz.
El sueño se acabó pero el cuadro es verdadero.
Tres am. Una hora inadecuada para leer a los filósofos de la sospecha.
Mis San Antonios
Parece que ahora
ella y
él, santos de mi devoción, quieren hacer comigo
eso de lo que suele encargarse él.
¿Qué les habrá hecho pensar que necesito ayuda espiritual?
Unzeitgemasse Betrachtungen
B entra con una moneda de 20 hellers en la mano. No tengo idea de cómo llegó hasta aquí, pero lo recibo como un augurio: como a ese paquete vacío de cigarrillos que guardé durante años, codicio todo lo que tenga algún origen checoslovaco.
*
Este tema me convoca: Andy, otra vez, hablando del sexo con la mucama,
cuestión sobre la que escribí hace un tiempo. Y Andy, de nuestro lado, sintiendo vergüenza ajena por lo que dicen sus compañeros de radio. Nadie,
estimado Beatnik, le pide más. Personalmente, prefiero no pedirle nada a nadie.
*
Ayer, en el día de todos los
pequeños y monstruosos Schopenhauers*, recorrimos los rincones artificialmente iluminados de la infancia, buscamos un pez dorado en una bolsita de nylon, recibimos a los nuevos ímpetus con los párpados hinchados y nos dormimos con las ráfagas estremecedoras de lo que está por empezar.
[*
En cuanto a mí, nunca he comprendido cómo dos seres que se aman y creen hallar en ese amor la felicidad suprema, no prefieren romper violentamente con todas las convenciones sociales y sufrir todo género de vergüenzas antes que abandonar la vida, renunciando a una aventura más allá de la cual no imaginan que existan otras. A.S.]
Sabia conclusión en la mesa de café
con
la chica del pelo como fuego:
Si de verdad creyéramos en la Revolución, estaríamos dedicándonos a otra cosa.
Movimientos demasiado vivos o demasiado lentos no percibidos
Los chicos dan vueltas en algo parecido a lo que era El Pulpo. Una nena se enrosca el pelo en el volante y tienen que raparla. Aquí cualquier epiléptico sufriría un ataque. Yo, por las dudas, siguiendo el camino de Keyserling, o de Jaspers, me retiro hacia una zona aislada.
*
Estamos en plena paradoja. Hay cierto confort en esa fatalidad (pensemos en el amor fati de Nietzsche, el ser-para-la-muerte de Heidegger, el pesimismo heroico del prefascismo y del fascismo, etc.). Pero sólo por ahora: no hay manera de eternizar este estado de cosas.
*
Viniste a escuchar, pero has confundido los brincos de la maravilla, el cuero del desastre. Te fuiste de manera brusca y después, contrapuesto, volviste para engrosar la lista de los que dicen mi nombre en diminutivo. Me encanta que me llamen así, por cierto.
Andy lee TP
Esta mañana Andy citó el
daily de Abraham sobre los besos. Dijo que había estado tratando de sacarlo al aire, pero que Abraham no quería salir. Me pregunté cuáles serían las razones (éticas, morales, idelógicas, anímicas?) por las que Tomás no aceptaba charlar con Andy al aire sobre el tema de los
besos entre hombres.
Pero sobre todo, me pregunté (confieso) si habría leído
lo que escribí sobre él y yo (buen, y Bielsa), allá por la primavera bloggera.
A veces, mientras busco una palabra en el diccionario o paro para hacerme un té, escucho el programa de Andy entre el zapping con otras radios. Una vez, hace medio poco, Andy estaba ofreciendo premios --un par de anteojos, entradas para un concierto, un libro-- y dijo: "Un libro de... Marcelo... Co-hen; no lo conozco pero debe ser bueno". Y entonces tuve dos certezas: que sobreestimo el background cultural de Andy (ya había sufrido una leve decepción cuando empezó a salir con
Emilia, pero, sí, viéndola se entiende todo), y que el mundo de la literatura es mucho más pequeño que el asteroide B612.
After long strumming on certain nights
Creo que soy un blanco fácil
Es tarde, casi medianoche. No voy a nombrar la esquina, pero no estoy en una avenida. Me ajusto la cola de caballo y pienso: tampoco llevo paraguas.
750 violadores en prisión fueron entrevistados para saber lo que buscan en una víctima potencial.
He aquí algunos hechos interesantes:
1) La primera cosa que ellos observan en una víctima potencial es el peinado. Es mas probable que ellos ataquen una mujer con un peinado tipo cola de caballo, trenzado o cualquier otro peinado que sea posible tironear mas fácilmente. Es probable también que ataquen mujeres con cabellos largos. Las mujeres con cabellos cortos no son blancos comunes
2) La segunda cosa que ellos observan es la ropa. Observan a las mujeres que usan ropa fácil de arrancar rapidamente . También buscan mujeres hablando por celular o haciendo otras cosas mientras caminan: esto les indica que están desatentas y desarmadas y pueden ser fácilmente atacadas.
3) Hora del día: las horas del día en que ellos más atacan y violan mujeres es al comienzo de la mañana, entre las 5:00h y las 8:30 horas, y después de las 22:30hs.
4) Método: estos hombres procuran atacar de forma y en lugares que puedan cargar a la mujer rápidamente para otro punto, donde no tengan que preocuparse de ser atrapados.Si usted esboza cualquier reacción de lucha, ellos acostumbran desistir en aproximadamente dos minutos: creen que no vale la pena, que es una pérdida de tiempo.
5) Paraguas: manifestaron que no atacan mujeres que cargan paraguas u objetos que puedan ser usados como arma a una cierta distancia (las llaves no los intimidan, porque para ser usadas como arma, la víctima tiene que dejarlos llegar muy cerca).
6) La pregunta salvadora: si alguien estuviera siguiéndola en una calle, andén o garage, o si estuviera con alguien sospechoso en un ascensor o en una escalera, mírelo directamente a la cara y pregúntele alguna cosa, tipo "¿Que hora tiene?" Si fuera un violador, tendrá miedo de ser posteriormente identificado y perderá el interés en tenerla como víctima. La idea es convencerlo de que no vale la pena elegirla.
7) El grito salvador: si alguien se presenta imprevistamente y la aferra, grite! La mayoría de los violadores dijo que soltaría a una mujer que gritase o que no tuviese miedo de pelear con él. Nuevamente: los violadores buscan BLANCOS FÁCILES. Si usted grita, podrá mantenerlo a distancia y es probable que él huya.
8) Esté siempre atenta a lo que pasa detrás suyo. En el caso que perciba algún comportamiento extraño, no lo ignore. Siga sus instintos. Es preferible descubrir que se equivocó y quedar medio desubicada en el momento, pero tengan la certeza de que quedaría mucho peor si el sujeto realmente atacase.
9) Grite FUEGO! En cualquier situación de peligro, en el caso que tenga que gritar, grite siempre "¡FUEGO! ¡FUEGO!" Acudirán \nmuchas más personas (curiosos). En el caso que su grito sea" ¡Socorro!" la mayoría de las personas se abstiene, por miedo.
10) Haga un favor; reeenvíe este material a las mujeres que conozca y también a los hombres, que a su vez pueden reenviarlo a sus amigas, esposas, hijas, novias, etc. Son cosas simples, pero pueden evitar traumas y, hasta, salvar una vida.
Material Policia Federal Argentina - Prevencion del delito - je.
A quién dedicás tus posts...
Porque, ¿no están todos estos escritos dirigidos, como misiles?
Pero, acaso, ¿no dedicamos todos, hasta los más pequeños actos de nuestras vidas?
Sueño en poemas malos y en un lugar inadecuado, como poseída por el fantasma de la noche, recuerdo uno y lo plasmo
Debo decir, pongo un plato
En la mesa cada noche
Espero que llegues
Ay qué emoción los motores
Que rugen desde la esquina más
Fuertes cuanto más cerca y se alejan
Cada vez. Voy a decir,
No es divertido sentir
Las miradas de la gente en el mercado
Cuando compro para dos, mi rostro
Surcado de cauces secos, las lágrimas
Ya no bajan. Veo la cruz
En la cadena de la mujer que espera
Delante de mí en la fila y rezo.
Nunca antes lo había hecho
Pero es hora de creer en algo
Riego la planta de mandarinas
Pensando que si la vieras recordarías
Mi nombre. Aunque últimamente dejo
Secar todo, hasta los ojos. Pongo el plato,
Hasta ese día, hasta ese día…