le jour c´est gonflant
la gente está cárnica, hace cola para colita. En la puerta de la escuela, incluso, me acerco porque las madres hablan: juan, ayer, la plaza, si estuvo bien lo de joe y el campo y una nueva forma de nominar: "mi papá, que es sobreviviente". ahá, ¿quién es/ quién no es sobreviviente de la dictadura? no digo de los campos, eh. de los campos de tortura, eh -je.
hace un par de años, cuando se instauró el feriado, un chico que trabajaba en una fábrica me decía:
te enterás.
ahora, ¿qué es lo malo de un feriado extremadamente largo? el abismo que nos da llenar el vacío de los días? el falso lunes de la semana que comienza in medias res, condensada, sin tregua?
voy caminando por la calle al mediodía y me encuentro con un chico de la 5ta. que busca a los pibes en la escuela.
voy caminando por la calle al mediodía, me siento a little defensive pero adoro la vitalidad.
la lógica del piropo va invertida: en los peores días, los mejores.
me iría sin norte a hablar de
sharon olds con paula -en versiones de ese ezequiel con quien comparto más que educación sentimental.
ah, y si te da, a las siete y media pasate por
acá.